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sábado, 1 de julio de 2023

Llegamos al Canal de la Mancha.

 Hola navegantes.

Las etapas van cayendo una tras otra y ya estamos en el Canal de la Mancha. He guardado la guía Imray de las aguas interiores de Francia y he vuelto a sacar el Bloc Marine Atlantique.

Ayer salimos de Plouer sur Rance a las 16 h. como os dije, para que coincidiera todo bien hasta Saint Malo (me refiero a la marea y las esclusas). Fue una navegación pasada por agua y con frío, supongo que lo que se conoce como una "meteorología bretona". La marea artificial en el interior de la presa estaba subiendo, y por lo tanto no había ningún riesgo de varada. Fueron cayendo las millas entre islas, casoplones, campos de fondeo y algún pueblecito. Las hicimos con el motor y el génova, para no fallar la hora de la esclusa, y aún así daba gusto ver a la vela empujar el barco junto con el motor.

En la esclusa de la presa mareomotriz entramos solos, y luego llegó un velerito rojo (a las izquierda en la siguiente foto) con una pareja mayor hecha un chocho:


Casi chocan el palo con el puente que pasa sobre la esclusa, se atravesaron dentro de la esclusa sin control, y no llevaban preparadas las amarras. Pretendían sujetarse sólo con las manos, y bajó de su torre el esclusero a decirles que se tenían que amarrar. Al salir de la esclusa se les paró el fueraborda y se los llevaba la corriente a la zona prohibida, que es donde pueden succionarte las turbinas. Allí se forman remolinos y corrientes de hasta 10 nudos. Les dimos remolque y al coger el cabo la señora no sabía lo que hacer con él. Intentó sujetarlo con las manos pero le faltaba fuerza, y tuve que gritarle que por lo menos le diera dos vueltas a la cornamusa, y como lo hacía por encima del balcón le dije que lo rectificara. Finalmente les sacamos de allí y lo que les había pasado es que se habían quedado sin gasolina. ¡Qué de novatadas!.

Un poco más tarde entramos en la esclusa de Port Vauban, en Saint Malo. Saint Malo tiene dos puertos y elegimos éste por estar más cerca del centro. Es una esclusa enorme, más de 150 metros, y la pasamos solos. Da pena ver tanto trabajo para un velerito de 6 metros.



El susto fue a la salida, que nos encontramos de morros con un mercante gigantesco que estaba entrando en la esclusa, y que lógicamente tuvimos que maniobrar nosotros para esquivarle. Él también pasó solo.

Finalmente llegamos al atraque bajo una lluvia intensa. Hoy pasaremos el día en Saint Malo como final de las vacaciones de Ana, y mañana la acompañaré a Rennes, esta vez en tren, donde intercambiaremos la tripulación con Bartomeu para llegar a Inglaterra (si lo logramos). Lo malo, que parece que ayer se nos enganchó la borrasca en el timón y hoy está lloviendo más todavía.

Con cuidado, navegantes.

3 comentarios:

  1. Hola Álvaro. Me alegro de que no hayas tenido grandes problemas para llegar a Saint-Malo.

    Es una ciudad de corsarios llena de historias como esta:

    En 1693, los corsarios de St Malo y los de Dunkerque llevan 8 años interceptando barcos ingleses, mas de 160 barcos hundidos.

    Las políticas de Luis XIV estaban generado muchas tensiones.

    El príncipe de Orange desarrollo en secreto en la torre de Londres un plan para destruir St Malo, y el centro de este plan era un navío preparado para que no fuese detectado de noche. Lo pintaron entero de negro y sus velas eran negras.

    Lo diseñaron para que tuviera un calado muy bajo, menos de 7 pies (son mas o menos dos metros), lo que le permitía llegar a la muralla, concretamente a la torre Bidouane ya que era esta torre la que servía como polvorín.

    Llenaron el barco de pólvora y metralla con el fin de hacerlo estallar cuando se estrellase contra la torre y así incendiar toda la ciudad.

    La noche del 29 de noviembre de 1693 los ingleses lanzan el barco “la maquina infernal” contra las costas de St Malo.

    Llegó sin obstáculo alguno y sin ser visto hasta unos 50 pasos de la muralla, unos 40 metros, y en ese momento un fuerte golpe de viento que venia del oeste precipito el barco contra las rocas que se ganaron después de este suceso el sobrenombre de las rocas de los ingleses.

    El barco encalló y el casco se rompió en su parte inferior.

    Comenzó a entrar el agua y a mojar la pólvora que estaba en las bodegas así que el ingeniero que dirigía el barco decidió prenderle fuego allí mismo pero el efecto fue mucho menos devastador de aquel para el que el navío fue concebido.

    Un saludo y buenos vientos
    Milo

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  2. Pues ya en el Canal de la Mancha!, y el tiempo fiel a sus hábitos en las aguas bretonas!. Se os avecinan cambios: tripulación y aguas jurisdiccionales, espero que de ahí no pasen.
    Buenos vientos!

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  3. Esa esclusa la pasamos hace unos años y no cabia un alfiler. Buena proa.

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