Conocer Cerdeña.

 Hola navegantes.

En la vuelta a Italia con el Corto Maltés nos quedamos sin conocer Cerdeña, la isla más alejada del Continente. Así que hemos decidido venir a conocerla en ferry, que sale de Barcelona, trayendo nuestro coche y las bicis.

El viaje empezó mal, con un atraso de casi seis horas. Se tradujo en que habiendo pagado un camarote tuvimos que pasar la primera noche en el aparcamiento del puerto, lloviendo y viendo una peli dentro del coche. En vez de embarcar a las 12 nos dieron paso a las 4, y el barco salió a las 6 de la mañana. Por suerte se movía poco y pudimos dar un pestañazo.

El trak en el ferry es sorprendente: unas 300 millas en 13 horas a rumbo directo, a una velocidad de 24 nudos (nosotros en el Corto Maltés 3 a 5 nudos). Además había un viento de fuerza 5 y olas de 1.5 a 2 metros, y el barco las pasaba por encima sin enterarse.

Nuestro camarote era de los más pequeños, y de los que llaman "exterior con vista obstruida" porque tiene delante la lancha salvavidas y no se ve nada. Ya os imagináis que para nosotros no es importante, a estas alturas, ver el mar.

 

Pero dentro de ese camarote cabría el Corto Maltés entero. 

Y un baño con ducha y todo.

Parece mentira que ese barcarrón entre en el mismo concepto "barco" que el mío. Tiene restaurantes, salas de fiestas, tiendas, piscina y hasta un casino.

Como siempre, lo mejor de los viajes es la gente que conoces. Hemos entablado conversación con Iñaki, un profe de Euskadi que se va un año sabático con su familia a vivir a Malta. Está haciendo el traslado en una furgoneta con su hijita de 14 años y compartimos nuestras inquietudes. Una valiente y original manera de educar a sus tres hijos y de que se les quite la marca de la boina.

En la siguiente foto, la Isla Asinara, nuestro primer contacto visual con Cerdeña. Es la que protege el Porto Torres de los temporales del Oeste:

Llegamos a Porto Torres, en el norte de Cerdeña, a las 19.30 h, y a Sassari, donde teníamos el Bed and Breakfast, después de las 20 h., ya sin tiempo para nada. Veremos la ciudad mañana y seguiremos el contorno de Cerdeña en sentido antihorario a partir de la tarde.

Con cuidado, navegantes.

La entrevista grabada.

 Hola navegantes. 

Si ayer no pudisteis escuchar la entrevista en Onda Vasca que os anuncie el 23 de marzo, aquí está el podcast (del minuto 41 al 1:08):

Clic aquí

Un saludo.

Las fotos, aquí al lado.

 Hola navegantes.

Ya he puesto aquí al lado, en la columna derecha, las fotos del libro de la vuelta a Italia. Buscad en la columna derecha:

"Para ver las fotos de "¿Cuándo llegamos?", clic aquí". 

Están clasificadas por los capítulos del libro. Cuando lo tengáis, en cada capítulo encontraréis algunas palabras o frases en negrita. Corresponden al sitio donde una foto ilustra lo que estamos contando. Lo hice igual en los libros anteriores. A pesar de que lo aviso en la contraportada, ya me han dicho los editores que algunas personas prefieren empezar el libro sin leer la contraportada, para no dejarse influenciar. Y luego algunos lectores me preguntan por qué no pongo fotos en los libros. Si las pusiera en el formato papel, el libro se encarecería mucho, y no podría poner más de 15 o 20 . De esta manera puedo ofreceros hasta 800 fotos, como en este libro, para que sigáis con más verosimilitud nuestras peripecias.

Os confirmo que el libro estará disponible poco después de Semana Santa. 

Con cuidado, navegantes.

Televisión a bordo.

 Hola navegantes.

Yo sólo veo la tele para las noticias mientras comemos o mientras cenamos. Y en las travesías largas, de varios meses, por el extranjero, es más necesario que nunca estar  informado de lo que pasa por el mundo y en tu país. Hasta ahora tenía la costumbre de escuchar en YouTube el canal 24 horas de TVE, pero claro, hay que tener wifi. Si no entrábamos a una marina, o no le funcionaba el wifi, no nos enterábamos de nada.

Hace poco uno con buen fondo me regaló una antenita de TV llamada MyGica, del tamaño de un mechero, que coge las emisiones de TV sin necesidad de wifi, ya que funciona como la antena de las casas. A pesar de su minúsculo tamaño, a mí me coge más emisoras de las que cojo en casa.

 Una vez seleccionadas las emisoras, se conecta con el móvil, al que utiliza como pantalla de TV. Además puedes descargarte una película o un capitulito y verlo en otro momento, incluso navegando, porque se almacena en el teléfono. Es perfecto para los días que la meteorología te inmoviliza en un puerto, y por ejemplo te tienes que pasar un día entero en el barco, lloviendo. Y un chollo si navegas con niños. La batería se recarga con un puerto USB.

Para oírlo mejor adaptamos el teléfono a un "altavoz bambú". Es uno absolutamente simple, ecológico y que no consume batería. Se trata simplemente de aprovechar el efecto de resonancia de una caña hueca de bambú, donde se incrusta el móvil en una ranura:

Sin ninguna electrónica, amplifica el sonido y lo hace estéreo, ya que lo difunde a los dos extremos de la caña hueca.Para ver la pantalla en horizontal y además estabilizar el altavoz, lo hemos sujetado con una goma al puntal del mástil:

Cuando te sale ahí el telediario español estando alejado de todo, por ejemplo el verano pasado en Francia o en Italia, y encima gratis, no sabes si beatificar antes al ingeniero que  diseñó la antena o al artesano que se le ocurrió lo del bambú. Ahora ya puedo presumir de que sin sacar fajos, en mi velerito de seis metros tengo TV de pantalla plana y conexión internacional en el extranjero.

Con cuidado, navegantes.

Entrevista en Onda Vasca sobre la donación a Ucrania.

 Hola navegantes.

El próximo domingo 27 de marzo, a las 22 h., va a entrevistarnos Edu Araujo, en su programa Itsas Tantak,  a Antonio García Gutiérrez, responsable de publicaciones de ExLibric (la editorial que ha publicado todos mis libros) y a mí. Va a preguntarnos por el fin solidario de la recaudación de los libros "La sonrisa de Mikel", "Carpe Diem, vela solidaria en Santander" y "Dibucartas al grumetillo". Son tres libros relacionados con nuestra actividad de vela solidaria con niños de oncología, de los cuales una parte o la totalidad teníamos el compromiso de dedicarlo a la lucha contra el cáncer. Ante la invasión de Ucrania, lo hemos concretado en ayudar a traer a España niños ucranianos con cáncer que no pueden seguir su tratamiento allí, por el bombardeo de los hospitales.

 

 

 La editorial y yo agradecemos a todos los que ya habéis comprado estos libros o lo vais a hacer de inmediato, vuestra ayuda en este fin humanitario. Podéis comprarlos on line en los enlaces que hay en la columna derecha de este blog.

Edu también me preguntará por la vuelta a Italia en el Corto Maltés y la inminente publicación del libro "¿Cuándo llegamos? (la vuelta a Italia del Corto Maltés)" que saldrá poco después de Semana Santa.

Podréis escuchar la entrevista aquí, como digo el domingo 27 a las 22 h:

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Con cuidado, navegantes.

Día mundial de la poesía.

 Hola navegantes. 

No es hoy, es mañana, pero he preferido adelantar su celebración al domingo porque los días laborables uno anda demasiado liado para disponer del tiempo necesario para disfrutar de una poesía.

Os he traído la que da título al libro "La sonrisa de Mikel". Son dibupoemas inspirados por nuestros grumetillos de Oncología a los que intentamos aliviar a través de la navegación. Mikel falleció a los 7 años. Un poco antes su padre tomó esta foto en la que se le veía, recién trasplantado, sonriendo a su hermano recién nacido en brazos de su madre, todo un canto a la vida por encima de la desgracia personal:

y aquí el dibupoema (clic encima para leerlo mejor):

Espero que os guste.

Recordatorio.

 

Podéis seguir la entrevista en este enlace:

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Nuestra colección de formas de llover.

 Hola navegantes.

Cantabria es una tierra que puede presumir de una gran colección de formas de llover: 

1. De arriba abajo, la más vulgar.
2. De lado, cuando el viento gallego (del Oeste) arrastra el agua de la lluvia que le acompaña hacia el Este. Aquí el paraguas no sirve para nada.
   
3. De abajo arriba, la más original, cuando llueve con fuerza sobre el mar o los charcos, y las salpicaduras suben desde el suelo o desde el mar y te mojan desde abajo.
   
4. En suspensión en el aire, el chirimiri, con gotas tan finas que no caen al suelo y que llamamos "calabobos" porque te crees que no moja, y deja empapados a los novatos.
   
5. La de la niebla que se licúa; ocurre cuando vas navegando, la niebla se invita a la fiesta y sólo notas que estás mojado si te desplazas con el barco y porque ves gotear las gafas.
   
6. La invisible que se condensa en la vela mayor y sólo llueve bajo la botavara, por donde escurre, pero no en otras partes del barco. Ocurre aunque no haya niebla.
   
7. La de agua salada, la más original; es agua que se levanta del mar en las trombas marinas y luego vuelve a caer. 
8. En invierno el aguanieve, cuando la precipitación en forma de nieve encuentra cerca del suelo una temperatura por encima de cero, el copo se derrite y nos cae con una forma intermedia entre la lluvia y la nevada.
9. La de barro o polvo rojo, por calimas que vienen desde el Sahara y atraviesan toda la península, y al llegar a Cantabria la lluvia la deposita. Ha ocurrido ayer y me encontré el barco así:

 Finalmente, la que no he visto nunca es la lluvia de ranas o de otros animalitos. Ocurre cuando un tornado o una tromba marina pasa por una zona pantanosa o una marisma y absorbe hacia la estratosfera a los pequeños animalitos (sobre todo ranas, pero también renacuajos, salamandras, etc) y al terminar el fenómeno se caen por su peso. Cuando la causa es una tromba marina lo que llueven son peces. Ha ocurrido varias veces en la historia, sobre todo de ranas, y fue muy comentada la de la película "Magnolia". Ahora se sabe su explicación científica, pero en la antigüedad se atribuyó a las causas más peregrinas, desde castigos de Dios hasta extraterrestres que se llevaban animalitos y tenían que soltar lastre. Curiosamente muchas veces las ranas caen congeladas, porque han ascendido hasta alturas bajo cero, y muchas reviven al caer al suelo.

Cantabria es una tierra sorprendente. En entradas anteriores os he enseñado delfines, ballenas, manta rayas, tiburones  y focas en la bahía,  y jabalíes en la playa. Ahora hay ganaderos que crían llamas, búfalos o avestruces, y te los encuentras en el monte en las excursiones. De pequeño vi una cierva que se escapó de la península de la Magdalena y cruzó la bahía nadando hasta Pedreña. En una nevada he visto a un zorro dejarse dar de comer como si fuera un perro. Un hipopótamo se escapó de Cabárceno y apareció en un pueblo cercano manso como una vaca. Un particular tenía dos leones en su jardín cerca de la Presa de Heras y al subir al Pico Solares oías sus rugidos como si estuvieras subiendo el Kilimanjaro. No os sorprenda si algún día os cuento una lluvia de ranas, para terminar la colección.

Con cuidado, navegantes.

Para los niños ucranianos con cáncer.

 Hola navegantes.

En el libro "Dibucartas al grumetillo" uno de nuestros grumetillos de vela cuenta cómo interpretó y vivió la leucemia que le diagnosticaron a los 8 años, y está ilustrado con las dibucartas que le escribía yo durante su ingreso. Está dirigido sobre todo a los niños, tanto a los enfermos para que entiendan lo que les está pasando, como a los sanos para que comprendan su suerte y aprendan a valorar las cosas que tienen, en su contexto. 

Como veis en la portada, los ingresos íntegros del libro se dedican a la lucha contra el cáncer infantil, habiendo renunciado los autores y la editorial ExLibric a cualquier beneficio.

Ante la invasión de Ucrania la sociedad se está volcando en la ayuda a las víctimas, en un ejercicio de solidaridad sin precedentes. La Fundación Aladina, que da apoyo emocional, psicológico y material a los niños con cáncer, ha puesto en marcha un programa para traer a España a los niños ucranianos con cáncer, para que puedan finalizar su tratamiento aquí, ya que en su país es imposible. Parece que cuando llueva sopa estos niños y sus familias sólo tendrán tenedor, porque se les suman las desgracias. Muchos son víctimas del accidente nuclear de Chernóbil, y después de eso, y de diagnosticarles el cáncer, ahora se encuentran con una guerra injusta en que les están bombardeando hasta los hospitales.

Por eso hemos decidido que lo recaudado con el libro "Dibucartas al grumetillo" se va a donar a esa Fundación y para el programa que he comentado. Si alguno de los que no os conformáis con el gimoteo queréis colaborar, podéis comprar el libro a través de este enlace:

Clic aquí 

Haréis el donativo y disfrutaréis de un bonito libro solidario para compartir con vuestros hijos, o para regalar a otras familias con niños. 

(Clic encima para leerlas mejor).

Con cuidado, navegantes.

Tertulia, segunda parte.

 Hola navegantes.

Como en la tertulia del pasado jueves en "A toda vela" se quedaron muchas cosas sin contar, Alberto me ha invitado a prolongarla con una segunda parte que será el próximo jueves 17, a la misma hora:

Podéis seguirla ese día en este enlace:

Clic aquí

Habrá, como en la anterior, un chat para plantear las preguntas que queráis. Y si no podéis escucharla en directo, no os preocupéis porque se quedan archivadas en YouTube para verlas en otro momento.

Con cuidado, navegantes.

"¿Cuándo llegamos?" va tomando forma.

 Hola navegantes.

El libro en el que cuento nuestra vuelta completa a Italia (y la costa mediterránea de Francia) el pasado verano, va tomando forma. Ya estoy corrigiendo las pruebas de imprenta y esta será la portada:

 Lógicamente hemos elegido una foto de la llegada a Venecia, el sitio más mítico del recorrido, aunque la vuelta propiamente dicha la terminamos en el interior, en Mantova, después de recorrer el río Po y sus canales.

Creo que muy posiblemente el libro estará disponible en Semana Santa. Estos son los capítulos:

1	Las incertidumbres de la pandemia y las primeras etapas, hasta Francia.
2	En Francia de isla en isla.
3	Navegaciones duras hasta Niza.
4	Primeras etapas en Italia.
5	Problemas con los atraques en el entorno de Roma.
6	El Archipiélago Pontino.
7	Cosas raras: el Fata Morgana y el comportamiento del piloto automático.
8	Conociendo Sicilia y las Eolias.
9	El Estrecho de Mesina y las costas desoladas del Sur.
10	El salto al tacón de la bota y la llegada al Adriático.
11	El horror del Promontorio Gargano, y las Islas Tremiti.
12	Meteorología podrida en el Adriático.
13	Reencuentro con Ana y el Delta del Po.
14	Llegamos a Venecia.
15	La navegación por el Río Po y sus canales.
16	La estancia en Mantova y el regreso a Santander.
17	Resumen, conclusiones y balance personal.
Anexo 1	Escalas y millas recorridas.
Anexo 2	Lo que llevo.
Anexo 3	El botiquín.
Anexo 4	Transcripción de las dibucartas.

Por otra parte os recuerdo que esta tarde hablaré de la vuelta a Italia y otras navegaciones con el Corto Maltés en la tertulia de "A toda vela":

Se puede seguir aquí, con la posibilidad de hacer preguntas, que os contestaré encantado:

Clic aquí.

Con cuidado, navegantes.

¡NO!

 No dejemos que la historia se repita.

Tertulia en "A toda vela".

 Hola navegantes.

El próximo jueves 10 de marzo, a las 20 h., el programa de Youtube "Tertulias a bordo" de Alberto Contreras, estará dedicado a nuestras navegaciones en el Corto Maltés.

Será una tertulia en directo de aproximadamente una hora de duración, donde hablaremos de nuestros viajes en un pequeño velero, desde aquel lejano de la vuelta a España hace 10 años a todos los que siguieron a raíz de él. Contaremos un montón de anécdotas y  muchos aspectos prácticos de la organización, la vida a bordo, las ventajas e inconvenientes del pequeño velero, la economía, etc. Al final se admitirán preguntas de los oyentes.

Para seguirla, escucharla y participar hay que entrar en Youtube y buscar "A toda vela tertulias" o entrar directamente en este enlace:

Clic aquí.

Con cuidado, navegantes.

Cambiar la tapa del tambucho.

Hola navegantes.

Los barcos envejecen con nosotros y a veces no nos damos cuenta. Cuando compré el Corto Maltés hace 18 años le hice nueva la tapa del tambucho, y la hice de polietileno (parecido al metacrilato pero más resistente) pensando que duraba más. Me pareció que quedaba más fea que la de madera, pero dí prioridad a la duración. 

Con el mismo material hice un asiento tipo delfinera en el balcón de proa, y a los pocos años le salieron grietas y se rompió bajo el peso de un adulto.

En la vuelta a Italia me di cuenta de lo mal que estaba la tapa del tambucho y a lo que me arriesgaba si se me rompiese por el camino:

 En la parte exterior han salido unas grietas que claramente afectan sólo a la zona expuesta al sol. En la siguiente foto, la parte no agrietada de arriba es la que recibe la sombra de la tapa horizontal del tambucho, y está perfecta:

La parte agrietada es la que recibe el sol todo el día, pues queda orientada al Sur:

 Por su parte, la cara interior de la tapa no tiene ni una sola grieta. En la vista de perfil se ve que las grietas llegan a la mitad del espesor del polietileno, y algunas ya lo atraviesan entero (en la siguiente foto, la parte de arriba es el interior de la tapa, y la de abajo el exterior):

Cualquier presión o golpe podría partir la tapa, y si se me rompe en una navegación tendría el barco abierto los días que tardase en hacer una nueva, expuesto a los robos y a las inclemencias meteorológicas.

Yo recomiendo tener sacado un patrón de la tapa del tambucho para poder hacer una nueva de urgencia, sin tener que dejar el barco abierto. Pero claro, para dar la vuelta a Italia y con la necesidad de liberar espacio para esa navegación tan larga, el patrón me lo había dejado en casa:

Ahora con calma he hecho una tapa nueva y he vuelto a hacerla de madera, que pesa menos que el polietileno y parece que no dura menos, aunque haya que barnizarla de vez en cuando. De entrada le he dado 3 capas de protector de madera y 3 de barniz, y el barco va a quedar mucho más marinero que con la de polietileno:

 

La vieja me la guardaré de repuesto para una emergencia, porque todavía no se ha roto.

Con cuidado, navegantes.