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viernes, 13 de octubre de 2023

Dibucarta de la entrada al Continente.

 Hola navegantes.

 Esta es la dibucarta de cuando se incorporó Ana y nos introdujimos en el Continente para atravesar la esquina Noroeste de Francia por los ríos y canales (clic encima para verla mejor).


Entramos en el Continente por el Río Vilaine. Es uno de los mayores de Francia, con 230 kilómetros de largo y 500 metros de ancho, que en los años sesenta se embalsó para evitar los daños de sus crecidas y para tener un reservorio de agua dulce, que abastece a un millón de personas. Se accede por una esclusa que permite utilizar los 50 kilómetros en que es navegable hasta Redon, donde se enlaza con los canales hasta Saint-Malo. Como el embalse tiene varios usos y el de navegación no es el prioritario, los navegantes tenemos que supeditarnos a los demás. Por ejemplo, en periodos de crecida la prioridad es evacuar el agua, y este imperativo puede limitar la navegación, y en periodos de estiaje la prioridad es la obtención de agua potable, lo que se ve entorpecido por la entrada de agua salada al río en las aperturas de la esclusa, y llega a restringirse totalmente el paso.

 Desarbolamos en el pueblecito de Foleux, ya dentro del río. Hay que tumbar el palo encima de la cubierta y reordenar todos sus espacios para guardar la botavara, las velas, etc., y hacer accesible la cubierta a pesar del estorbo del palo y las bicis, que tienen que estar muy accesibles pues se usan mucho. En mi barco la operación con la grúa lleva una media hora, y en total unas 4 horas. Al desarbolar se aprovecha para inspeccionar las partes del palo que suelen ser inaccesibles, como las crucetas y la perilla.
 

A partir de Redon entraríamos en los canales de Bretaña y pedimos información sobre las algas invasivas. La eutrofización (o "sopa verde") es un problema recurrente provocado por el exceso de nutrientes procedentes de la actividad humana. Las algas pueden bloquear la hélice o meterse por el circuito de refrigeración y obstruir el termostato, lo que ya nos ha pasado en otros viajes. El motor puede sufrir un calentón y quemarse la culata. Aunque es un problema típico del verano, cuando llegamos a Redon en junio ya disponían en Capitanía de las zonas obstruidas. Y en los canales que tomaríamos nosotros ya había 7 zonas con la "navegación perturbada". Utilizan una máquina que llaman “cortacésped” para limpiarlas, pero el efecto dura poco (las algas crecen unos 2 cm cada día) y la limpieza de las zonas que nos afectarían se iba a realizar una o dos semanas después. Así que iniciamos la navegación interior sin saber si lograríamos llegar al Canal de la Mancha. ¡Cuántas incertidumbres otra vez!.

Con cuidado, navegantes.

1 comentario:

  1. Impresionante aventura.
    Enhorabuena de nuevo.
    No paras de conseguir tus retos. Algún día me gustaría poder acompañarte.
    Consigues inspirarnos.
    Un saludo con admiración!


    "Hola navegantes ya se ha incorporado Ana a la navegación y con ella vamos a atravesar Bretaña por los canales. Va a ser un gran reto por la cantidad de esclusas, y por la proliferación de algas y nos hará falta un poco de magia para conseguirlo. Pero intentaremos pasárnoslo bien, que es de lo que se trata, y no dar plantón a nuestro siguiente tripulante en Saint-Malo."
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