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miércoles, 15 de julio de 2020

Qué bonita sorpresa, Avilés.

Hola navegantes.

Hoy salimos un poco tarde de Gijón, pues tuvimos que resolver el tema de la bisagra que se rompió ayer (encontrar una igual y sustituirla) e ir al súper. En la foto, David a la salida de Gijón, frente a la Piedra de Sacramento. Hoy está tranquila, pero en cuanto hay oleaje da miedo ver cómo la engullen las olas.


Como salimos tarde nos planteamos una navegación corta y nos hemos venido a Avilés. Hemos contorneado el Cabo de Peñas, el más sobresaliente de Asturias, en una jornada de navegación fabulosa, 24 millas y todas a vela bajo un cielo de cartulina.


Como muchos cabos del Cantábrico, el de Peñas despide una restinga de rocas que le hacen muy peligroso y nos obligó a darle un respeto de varias millas. En  la siguiente el Cabo de Peñas visto desde el Norte.


Yo tenía mucho interés en conocer Avilés, uno de los pocos puertos de Asturias en que no había entrado con el Corto Maltés. Creo que no despierta mucho interés entre los navegantes por su entorno industrial, ya que está en una profunda ría llena de grúas, astilleros, mercantes, almacenes, etc. Pero es una verdad a medias. La orilla derecha es verdad que es así, pero la izquierda conserva una belleza natural digna de apreciar desde el barco:




La ría tiene su origen en una falla tectónica invadida por el mar y no en un río, como otras del Cantábrico.

La marina deportiva está al fondo del la ría. Se reconoce de lejos por la escultura "Avilés", que son como tres cuernos saliendo del asfalto, aunque en la foto parezca que salen de mi sombrero.



Hemos recorrido la ciudad, que tiene un precioso paseo por la orilla de la ría


unos parques como los londinenses con árboles muy curiosos, como este con forma de perrito (sí, es un árbol):


un centro urbano con edificios señoriales y una animación en la calle digna de una capital. Hoy había cine al aire libre en la plaza del ayuntamiento.

En el capítulo de las curiosidades, fijaos en qué se han convertido las aguabenditeras de las iglesias:


Hoy dormiremos en Avilés. La marina tiene las duchas y sus aseos cerrados por el Covid y nos han hecho un precio especial. Y como ya han levantado el confinamiento en Galicia podremos seguir hacia las Rías Altas, como teníamos previsto. Así que mañana seguiremos lentamente hacia el Oeste, donde tenemos el cambio de tripulación el domingo en Ribadeo. Se incorporará Ana para hacer conmigo las Rías Altas las próximas dos semanas.


Con cuidado navegantes.

2 comentarios:

  1. Bravo Álvaro y David!
    ¿Que quiere decir "un cielo de cartulina?

    Un saludo

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  2. Hola Aloes. Es una expresión para definir un cielo de un solo color y brillante, en este caso azul cielo y sin una sola nube. Un abrazo.

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