Hola navegantes.
En entradas anteriores os he hablado de las ventajas de llevar bici en el barco, por ejemplo en esta:
Las bicis te facilitan los recados, la visita a las ciudades, y la apertura anticipada de las esclusas en los canales. Yo las considero más importantes, en la vela de crucero, que unas velas de repuesto, por ejemplo, por citar algo que abulta más o menos lo mismo.
Pues algunos consiguen el más difícil todavía, como estos dos amigos que navegan en un Arpège (un velero de 9 metros de eslora) ¡con una moto!:
La llevan amarrada en la cubierta de proa, donde recibe todas las salpicaduras de las olas, por lo que me imagino que la moto no durará mucho, comida por el óxido. Pero lo han conseguido.
Con cuidado, navegantes.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios son bienvenidos. Lo más cómodo es poner tu nombre al final del texto y luego elegir como identidad "anónimo".