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jueves, 27 de abril de 2023

Santander-Londres: los puntos negros 3) la aceleración del viento en cabos y estrechos.

 Hola navegantes.

Igual que el agua, cuando el viento es forzado a pasar por un estrechamiento entre acantilados se acelera. Pasa lo mismo cuando el viento en su recorrido encuentra un cabo, al que debe contornear dando un rodeo sin que las partículas de aire se aparten del resto de la masa, que se comporta como un todo. Se produce entonces un incremento de la fuerza del viento en las proximidades del promontorio, en un área semicircular con forma de abanico centrada por la punta del mismo. El incremento puede llegar a ser de dos escalones en la escala Beaufort.

En los estrechos la máxima aceleración del viento suele ser en el centro, mientras que en los cabos se produce una ligera aceleración muy cerca de la costa, y una aceleración más fuerte por fuera de la anterior. A algunas millas del cabo deja de notarse. Si además el cabo es alto y montañoso, a sotavento puede añadirse un viento catabático al acelerarse el aire por el descenso de la cara de sotavento de la montaña.


Los errores a evitar:
  •  Pasar muy cerca de un cabo con viento fuerte, sobre todo si es de cara, sin haber tomado rizos antes de abordarlo. Podemos encontrarnos en dificultades para tomar los rizos cuando estamos ya dentro de la coctelera.
  •  No tomar en consideración el paso de un cabo en la planificación de la ruta. Un cabo pasado de ceñida añade varias horas a la jornada, y eso en el Canal de la Mancha puede significar que se invierte la marea y no llegas a destino.
  • Pensar que el reforzamiento del viento terminará al franquear el cabo. Como se ve en la figura anterior, el reforzamiento no es sólo un semicírculo que continúa tras franquearlo, sino que el viento catabático (a sotavento) puede golpearte como un objeto sólido, siendo peor que frente al cabo.
El principal cabo que tendremos que superar para llegar a Londres será el de La Hague. Es como un cuerno que sale de Francia y se introduce casi hasta el centro del Canal de la Mancha, acelerando los vientos, tanto del Este como del Oeste, en dos grados (si entras con fuerza 5, en su entorno habrá fuerza 7):


Además, si os acordáis al Oeste del cabo está también el Raz Blanchard, la corriente de marea más poderosa del viaje, que como ya os dije puede alcanzar 11 nudos. Al contornear este cabo en la vuelta a Francia nos dimos cuenta que había como un límite impreciso paralelo a la costa, que cuando lo rebasábamos (acercándonos a tierra) el mar se llenaba de turbulencias. Si virábamos y nos separábamos de la costa el mar se calmaba. Seguramente en el entorno del cabo el viento, o la corriente del Raz Blanchard, se reforzaban y daban lugar a ese fenómeno, que en Alderney llaman “overfalls” y hace referencia a violentos remolinos en el seno del agua. Pero para Daniel y para mí terminó siendo como un juego, dar un bordo hacia tierra y virar justo cuando empezaba la batidora. Ventajas de pasarlo con buen tiempo.

En resumen, un cabo podrido donde parece que han querido juntar un túnel de viento con un canal de experiencias hidrodinámicas para poner a prueba nuestros conocimientos. 

 Al atajar por los canales nos libraremos de pasar los cabos del Finisterre francés, también temidos, pero en esta navegación tan larga pasaremos por otros, no tan famosos, a los que igualmente tendremos que respetar.

Con cuidado, navegantes.

4 comentarios:

  1. De otro foro:
    El problema no es sólo la aceleración del viento en los cabos, sino el mar que produce un viento contrario a la corriente.
    Dos veces que he pasado, dos veces que me he encontrado con muy mala mar en el Raz Barfleur, la punta E de la prominente península de Cherburgo.
    Las cartas aconsejan pasar a más de cinco millas, y la primera vez había solamente 16 nudos e íbamos a 4 millas de la punta o cosa así, al ver la anotación de la carta comenzamos a separarnos un poco más pero la corriente favorable ya nos había cogido, y con los míseros 16 nudos se montó un mar picudo en el que el barco cabeceaba casi metiendo la proa...un susto nada más
    La segunda vez, ya advertido, fue peor, porque realmente no es fácil evitar el momento en que la corriente se pone contraria al viento...y con 25 nudos y un barco que no era bueno en popas, la paliza que nos dió fue memorable. Con viento a favor y corriente en contra no avanzas nada y te quedas como un tonto bajando olas altísimas sin moverte del sitio..
    Al parecer hay un paso posible pegado a las piedras, pero me da la impresión de que los riesgos pueden ser aún mayores.
    Prevención: intentar pasar con mareas muertas (cuarto creciente o cuarto menguante), previsión de menos de 15 nudos y pasar bien fuera de la punta.
    No pasé por el Raz Blanchard, existe la alternativa de pasar por el norte de Alderney, la zona de Les Casquets es también bastante peliaguda e impresionante, pero las corrientes son menores que en el Raz.

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  2. Pues imagínate con un 23 pies. Para nosotros lo básico es la planificación. Pasamos el Raz Blanchard con viento y corriente a favor y fue una de las etapas más agradables de la vuelta a Francia. Y el Cabo La Hague hacia el Este por el paso interior que comentas, a 2 millas de la costa, igualmente con el viento y la marea a favor, otra gozada. Hay que tener paciencia para pasar cuando se puede sin peligro.

    Alvaro.

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  3. El paso interior era para punta Barfleur...nos lo daba el plotter como ruta más corta...Vade Retro!!
    El paso existe, Chenal de Hedouin, pero hace falta estar bien seguro de la precisión de la carta que lleves y mejor, preguntar a los locales.
    En crucero se puede escoger más, en transportes el tiempo es muy importante, y a veces, se paga.

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  4. Es curioso, pero el paso lo recuerdo como un dia en calma y tranquilo sin nada importante e incluso aburrido, como cambian las cosas segun la meteo que tienes o sufres, un abrazo.

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