Estudiando las gaviotas en la Isla de Mouro.

Ayer fuimos con los niños de Valdecilla a la Isla de Mouro. La ida fué fenomenal porque el viento venía de popa y hacía sol. Al llegar vimos que el fondeo no era seguro al 100% por la ola de mar de fondo, que siempre hace temer que el ancla garree. Por eso cuando vinieron a desembarcarnos los socorristas de Cruz Roja les pedimos que se quedasen hasta que acabásemos la visita. Y fue providencial, porque a media tarde dos de los veleros garrearon, y gracias a ellos pudimos volver a tiempo a bordo para solucionarlo. Aquí veis a los 5 veleros que formábamos el grupo, desembarcando en la zodiac.

Por lo demás, estudiamos los anidamientos de gaviotas patiamarillas, encontrando todas las fases de su reproducción: huevos cerrados, huevos con un agujerito de alimetación, pollitos recién salidos del huevo y pollos del tamaño de gallinas. Y todas las conductas de defensa por parte de los padres que rodean estas incursiones: chillidos, vuelos rasantes, cagadas desde el aire, etc. Una tarde redonda.

Y para que no se nos olvide que estamos en Santander, al final se nubló, hubo que sacar toda la ropa de invierno y finalmente llegamos a puerto lloviendo.

El martes 24 vamos a remontar el Río Cubas, que desemboca en la bahía de Santander. Sólo se puede con coeficientes de marea altos, como el de ese día (103) y en las horas que rodean la pleamar.