Hola navegantes.
La verdad es que este cuaderno de bitácora era premonitorio, nunca me había dado cuenta hasta que lo he repasado al terminar el viaje.
Cuando llegamos al Mediterráneo siguió azotándonos la ola de calor. El nivel de sequía era el más elevado de los cuatro existentes, y el agua sólo podía utilizarse para usos sanitarios, bebida y seguridad civil, estando restringida para la agricultura, lavado de vehículos, llenado de piscinas, etc. Casi toda Francia la sufría, debido a una primavera y un verano poco lluviosos, a 27 días con ola de calor y al calentamiento global del planeta. Una de las islas no pudimos visitarla porque estaba prohibido el acceso por el riesgo de incendios, y el día nacional de Francia, el 14 de julio, que conmemora la toma de La Bastilla, en muchos sitios no se tiraron los fuegos artificiales por el mismo riesgo. En el resto de Europa era parecido.
En mi cuaderno de bitácora llegué con las anotaciones a una foto curiosa con una niña mirando el mar desde la orilla de una playa, y asomando del mar sólo la cabeza y el brazo derecho de la Estatua de la Libertad, el de la antorcha. Obviamente había subido el nivel del mar por el cambo climático y se había sumergido Nueva York. Puse una viñeta con forma de nube saliendo de la cabeza de la niña que decía: “Según el cuñado de Rajoy, era mentira”.
También es muy gracioso, ahora que estoy en casa en invierno, ver en mi cuaderno de bitácora los variados adjetivos que iba dedicando al sol cada día: sol horripilante, sol sahariano, sol del Sahel y de todos los demás desiertos del planeta, sol con uñas, sol de derretir el plomo, sol insufrible, sol asesino, sol de activar a las chicharras, sol de derretir coletas, sol como el que pintan los niños, sol regio, sol de plomo, sol de Costa Azul, sol de intensidad brutal, sol impenitente, sol no compasivo, sol de escándalo, sol impasible, sol como el as de oros, el cabronazo, sol sublime, sol de quemar las orejas, sol tórrido, etc. Ahora parece gracioso pero entonces no lo era en absoluto.
Con cuidado, navegantes.

No hay comentarios:
Publicar un comentario
Los comentarios son bienvenidos.