Hola navegantes.
Ya os he hablado en otras entradas de mi reticencia acerca de los barcos con alerones, que vuelan sobre el agua. En los entrenamientos para seleccionar los equipos que disputarán la Copa América se ha grabado en directo el naufragio del barco americano, American Magic, en la Bahía de Auckland. Al salir de una boya el barco levantó el vuelo, se clavó de proa y se volcó, para a continuación comenzar a hundirse, víctima de una vía de agua. Por suerte la tripulación salió ilesa.
Para ver el vídeo del accidente:
Clic aquí
Primero
el barco quedó volcado sobre babor, pero como las regatas son cerca de la costa enseguida acudieron los
bomberos y otras embarcaciones provistas de boyas de flotación, bombas
de achique y hombres rana, que consiguieron enderezarlo. La segunda
sorpresa fue que el barco estaba lleno de agua, debido a un agujero de
un metro de ancho en la proa, por debajo de la línea de flotación,
seguramente causado por una
batería que perforó el casco de carbono después de
soltarse durante el golpe. Después de grandes esfuerzos en los que la
tripulación conoció la versión larga del desarrollo de los minutos, el
barco pudo ser reflotado y remolcado a puerto. Pero imaginaos ese mismo
accidente en mitad del Pacífico Sur. No habría habido supervivientes.
Al parecer van a poder recuperar la funcionalidad del bólido en unos 10 días, invirtiendo una suma pecaminosa y reutilizando materiales mecánicos y electrónicos de su barco anterior, y sellando el agujero del casco.
Cualquier parecido de "esto" con las navegaciones que hacemos los demás es pura coincidencia.
Con cuidado, navegantes.
Entiendo tus reticencias, pero ahí está la Vendeé. Ha habido fouls. Es verdad que no ha habido condiciones extremas pero...
ResponderEliminarCreo que algún día una versión "dócil" de los alerones llegará a barcos de serie.
Aunque el problema será su manejo. Ayer oía a un diseñador que el problema de los fouls, igual que con multicascos, es poner un "freno" para no correr demasiado en cuanto sube un poco el viento.
Jon Intxaurbe
Hola Jon. Precisamente la Vendée está siendo un ejemplo de por qué no es lógico usar los foils en esos mares. La mayoría de los abandonos han sido de barcos con foils, incluyendo el de Kevin Escoffier, que primero tuvo una vía de agua por el foil y luego se partió por la mitad en una ola y se hundió en pocos minutos. Si no llega a dar la casualidad de que había cerca otro barco de la regata hubiera perecido.
ResponderEliminarYo digo que dejar navegar a esos barcos por los océanos o por los mares donde navegamos los demás es un peligro. Por los océanos es como meterse con un Fórmula Uno por las dunas del Paris-Dakar. Y por donde navegamos los demás como que dejasen circular por la carretera nacional a unos Formula Uno lanzados a un metro por encima del suelo, a una velocidad seis veces superior al resto de los usuarios, y con un alerón cortante sobresaliendo de la carrocería. Los barcos con foils tiene peligro para los tripulantes (ya ha muerto uno lanzado contra el palo cuando el barco se frenó al volver a apoyarse en el agua) y para los demás, debido al escaso control cuando el timón se sale del agua al volar (uno arrolló a una zodiac y amputó las dos piernas a una señora con el foil). Por no mencionar los peligros para los mamíferos marinos, a los que degüellan mientras duermen en la superficie, porque van lanzados sobre sus cuchillas sin meter ruido.
Como son un reto para los ingenieros y ellos no van a dar marcha atrás, deberían poder navegar sólo por circuitos de regatas separados.
Pero claro, no es más que una opinión y puedo estar equivocado. Un saludo.