Los que no navegan no se dan cuenta de la cantidad de equipaje que hay que llevar al barco, sobre todo porque hay que meter el traje de aguas completo, ropa de abrigo hasta en verano, mucho de repuesto por si te mojas, etc. Y luego resulta que los puertos suelen estar lejos del centro de las ciudades, donde están las estaciones de autobús o de tren. O sea que te encuentras cargado de equipaje y a ver cómo lo llevas. Fijaos cómo se ha ido hoy Mario (y aún le quedan ganas de sonreir):
Y otra cosa práctica: la carta vertical. Así siempre la tienes a la vista para una emergencia:
Hasta pronto.
Hola Alvaro conseguí localizarte gracias a tu blog y veo que estas en plena aventura, soy Agar Castillo nos presentó Ricardo en la Marcha Luchamos por La Vida de LCB, solo decirte que cuando regreses me gustaría poder charlar de tu libro, de tus inquietudes...y de todo lo que consideres interesante comunicar a través de la radio, no te olvides! a tu vuelta ponte en contacto con nosotros y quedamos ¿si? saludos y buen viaje!
ResponderEliminarRecibido Agar. En Julio estaré en Santander. Un abrazo.
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ResponderEliminar...Hola colega, y por lo que veo, verdadero navegante..! Aparte de saludarlo el motivo es para señalarle que Arcachón en Francia, es para los argentinos nautas, un recuerdo imborrable de donde Vito Dumas, allá en la década del 30, compró un viejo velero de regatas de 8 m., lo alistó a medias y se largó a cruzar el Atlántico hasta la Argentina, en su primer raíd de gran aliento, antes de dar la vuelta por los "Cuarenta Bramadores" Ese lugar lo conocí de apurada, cuando viajamos a París, estando en Francia de visita, con unos parientes del Bearn, pero claro desde tierra...! Y muy de apurada...!
HWBarzola
Hola Hugo. He leido creo que todos los libros de Vito Dumas, que es uno de los referentes de cualquier navegante. No sabía que Vito había comprado su barco en Arcachon. Creo que debe ser un orgullo ser compatriota de Vito. Un saludo
ResponderEliminarAlvaro.