Visitas al blog:

viernes, 22 de junio de 2018

El Finisterre francés.

Hola navegantes.

Estamos recorriendo Bretaña con un coche alquilado, pero como este blog es principalmente para temas náuticos no voy a contaros la ruta turística, sino lo que tiene que ver con el mar y la navegación.

Hemos estado en el faro de Saint Mathieu, el más occidental de Francia. Su estética es preciosa precisamente por estar construido a uno o dos metros de una abadía benedictina de la edad media. ¿Os imagináis pretender construir eso ahora?.


Aprovechando el paso por la punta oeste de Bretaña hemos investigado lugares de abrigo donde poder esperar la corriente de marea para pasar el Canal du Four, que es el estrecho paso entre la isla de Ouessant y el Continente. Por suerte hemos encontrado al menos tres. La playa de Locmaría que tiene boyas y un pequeño pantalán, el puerto pesquero de Le Conquet, donde me han dejado usar una boya de servicio del puerto que ya no utilizan y donde me han dicho que puedo amarrarme al muelle fuera del horario de las vedettes que van a la isla de Molene:



y la ría Abber Ildut. En esta última han construido hace un año un pantalán con plazas para visitantes que no venía en mi guía Imray, y me va a facilitar mucho el paso de Finisterre. Su entrada se las trae, rodeada de escollos y con la corriente lateral, pero dentro de la ría te encuentras un abra de paz:


Otra curiosidad ha sido el faro de Trézien. Tiene 37 metros de alto y es el que controla la entrada del Canal de Four aunque está construido 500 metros tierra adentro. Recientemente se ha desatado una polémica sobre si pintar los faros con pintura o no, y la tendencia es a dejarlos sin pintar. Los detractores aluden al deterioro paisajístico, y los partidarios a la seguridad marítima, ya que se ve mucho mejor un faro pintado de blanco que del color de la piedra. En el de Trézien han optado por la solución salomónica, y la cara que da al mar está pintada y la que da a tierra no:


Ahora un tema que toca a mí profesión y me ha indignado. Después de todos lo esfuerzos de la salud pública para transmitir los peligros del tabaco, en Francia han permitido comercializar unas cajetillas de cartón un poco más grandes que la de tabaco, donde encaja a la perfección la cajetilla de cigarrillos, y que lleva un mensaje completamente opuesto tapando el oficial:


Esto en España no se permitiría, tenemos que estar orgullosos de nuestras normas.

Hasta mañana navegantes.




No hay comentarios:

Publicar un comentario

Los comentarios son bienvenidos. Lo más cómodo es poner tu nombre al final del texto y luego elegir como identidad "anónimo".